Acereros fintó muy bien que habría de conformarse con los dos lanzadores que tenía: Kenny Pickett y Mason Rudolph. Aun cuando de ellos no se esperase nada espectacular. La realidad trascendió este lunes, Russel Wilson fue firmado y sin duda será el gran titular que el equipo seis veces campeón esperaba.
Wilson viene de una problemática campaña con Denver, no tanto porque no supiera conducir la ofensiva o lanzar pases de anotación, sino porque algo no hizo buena química entre un jugador algo problemático y la organización de los broncos, desde los dueños hasta el entrenador.
Un análisis de Enrique Garay, por ejemplo, destaca que Wilson tiene un mejor escore que Lamar Jackson, el jugador más valioso de la liga.
En cuanto a los costos, Pittsburgh se estará llevando seguramente una ganga, pues los broncos están por recuperar algo de lo perdido y no tanto por hacer una gran operación financiera.
De hecho, nominalmente los acereros podrían pagarle el mínimo a esta superestrella que comenzó su descenso en aquel superbowl en el que, a dos yardas de la zona de anotación, lanzó una inesperada intercepción.